¿Creías haberlo visto todo?

Ubicamos la acción, Facultad de Ciencias, 24 de junio a las 12 horas, selecto grupo de alumnos y alumnas pre-universitarios y una visita, que siempre recordaremos, orquestada por Don Manuel.

Llegamos al punto de encuentro y tras dar señales nos recibe de forma inmediata Aniceto Murillo Más . Su sola presencia y personal carisma auguran lo que está por venir.

Comenzamos con una breve presentación y composición de lugar. Aniceto nos muestra dónde y de qué forma están distribuidos el resto de edificios y facultades del campus.

A continuación, y envueltos desde el primer momento por la más cariñosa de las acogidas, cruzamos hasta el Aulario Severo Ochoa, donde conocemos alguna de las Aulas de Informática. En ellas, alumnos y alumnas de distintas especialidades cuentan con los equipos necesarios para desarrollar las prácticas pertinentes. Para hacer uso de dicha dotación, tanto hardware como software, cada profesor solicitará al comienzo del curso académico la concesión, en un horario determinado, del laboratorio que estime oportuno. En función del tipo de docencia, cada ordenador ofrece la posibilidad de trabajar con diferentes sistemas operativos.

Continuamos con la ronda y nos dirigimos, ahora sí, a la Facultad de Matemáticas, propiamente. Como no podía ser de otra forma, situada en el módulo central del complejo, representando la virtud y el equilibrio del docto conocimiento, se encuentra cobijada por sus fieles compañeras de la Ciencia, la madre Química y la sabia Biología.

Nuestro amigo catedrático lo expresa bien, y es que las instalaciones, a pesar de lo que pueda parecer, no hacen justicia del nivel científico que atesoran sus grupos de investigación, de amplio reconocimiento internacional. Sin ir más lejos, sirva de ejemplo el proyecto que actualmente ocupa a Aniceto, siendo el mejor financiado por el Ministerio.

En nuestro privilegiado paseo somos sorprendidos con la hospitalidad del señor Amable García Matín, quien, haciendo honor a su nombre, nos atiende y nos deja pasar a una clase de tutoría. Nos comenta que están repasando Teoría de Grupos. Dejamos que el profesor Amable siga con su trabajo y subimos a la zona de despachos. No sin antes recibir por parte de Aniceto, y a pie de escaleras, una lección de un minuto acerca de la utilidad y extensas aplicaciones que puede proporcionar la definición de conjuntos de elementos no estrictamente numéricos. Impresionante.

Ya arriba podemos ver la Sala de Juntas, estancia en la que tiene lugar la toma de decisiones importantes. Sus paredes llaman la atención, aderezadas con los retratos de los anteriores Decanos.

Previo paso a presentarnos su propia dependencia, Aniceto nos enseña la Secretaría del Departamento de Álgebra, Geometría y Topología. Una vez en los despachos tenemos el enorme placer de conocer a varios de sus compañeros como son Antonio Viruel, Nieves Álamo Antúnez o Carlos Criado. Y de manera absolutamente improvisada nos convertimos en atónitos espectadores de Carlos y Nieves, que nos deleitan exponiendo algunos de sus curiosos útiles de trabajo. Entre ellos podemos destacar un toro y una banda de Möbius con los que poder resolver el problema de las tres casas y los tres suministros, la proyección tridimensional de un cubo de cuatro dimensiones, una esfera que podemos evertir, o una regla y un compás destinados a la geometría de la esfera.

En fin, después de tales demostraciones de carácter magistral seguimos con la visita. Eso sí, con la dificultad de borrar el asombro de nuestros rostros tras lo que acabamos de presenciar.

Como broche de lujo a esta apasionante guía nos espera el señor Decano, D. Francisco Palma, para hablarnos sobre aspectos generales del Grado en Matemáticas y de la Facultad de Ciencias. Dicha charla, que en un principio estaba programada en el Salón de Grados, se hizo finalmente en la Aula Jacques-Louis Lions, ya que el anterior emplazamiento estaba precintado con motivo del desprendimiento de unas lamas la noche anterior. Esta sala que ponen a nuestra disposición, y que rinde homenaje al prestigioso matemático francés, es de las mejores dotadas tecnológicamente de toda la Facultad.

Don Francisco Palma, en tono cordial a la par que distendido, estuvo haciendo hincapié en la importancia que tienen las Matemáticas en el resto de disciplinas científicas, y animó a los estudiantes allí presentes, recién graduados en las Escuelas del Ave María, a matricularse en esta apasionante carrera. También se encargó de subrayar la dificultad que encierra la formación en Matemáticas y el elevado abandono que se produce en el primer año. Renuncia ésta que no tiene tanto que ver con la capacidad del alumnado como con los problemas de adaptación a la nueva dinámica de trabajo. En este tipo de aprendizaje no tiene cabida el estudio de última hora. La clave del aprobado y la superación está sin duda ligada al esfuerzo y dedicación diarios.

Llega el triste momento de dar por finalizada esta emocionante aproximación al universo matemático y despedirnos del perfecto anfitrión, el ilustre catedrático, el señor Aniceto Murillo. Y para esto no hace falta decir que es de obligado cumplimiento una parada en el “santuario” de toda facultad, la cafetería. Allí refrescamos nuestras gargantas mientras comentamos las mejores jugadas. ¡Irrepetible jornada la de este miércoles!

Gracias a Aniceto, sus colegas y D. Francisco Palma por hacer mágica la misma realidad.

Gracias a Don Manuel por transmitir sin descanso el más puro espíritu de la enseñanza aplicada.

Gracias a Charo, Marta, Eva, Inma, Javier y Ángel por inyectar con vuestra simple mirada la ilusión y compromiso con el buen hacer y los valores sustanciales de la vida.

Gracias. 

Pablo Pozo

Este post participa en la edición 6.5 “primos de Mersenne” del Carnaval de Matemáticas, alojada en el Blog del Departamento de Álgebra de la Universidad de Sevilla